La Biblia y su Tradición The Bible and Its Tradition

La Biblia y el racismo

Dra. Allison Gray, Universidad de St. Mary’s

La Biblia y su Tradición,
2 de octubre 2021

The Bible and Racism

Dr. Allison Gray, St. Mary’s University

The Bible and Its Tradition,
October 2, 2021

Me gustaría empezar con una historia. No es de mi autoria. Es de Howard Thurman, un activista Afro-Americano, filósofo, defensor de los derechos humanos y teólogo que vivió de 1899 a 1991. En su juventud, solía leerle a su abuela dos o tres días a la semana. Ella generalmente elegía pasajes bíblicos, pero Howard se dio cuenta que ella nunca quiso que le leyera de las cartas de Pablo. Un día Howard se armo de valor y le preguntó porqué. ¿Cuál fue su respuesta? Resulta que ella había crecido esclavizada en una plantación en Florida, en dónde un pastor cercano al terrateniente de vez en cuando sostenía servicios para las personas esclavizadas. Aquel pastor siempre mencionó a Pablo en sus sermones, haciendo referencia unas tres o cuatro veces al año al siguiente pasaje: “Esclavos, obedezcan a sus amos… como a Cristo.” La abuela del señor Thurman le explicó, “Le prometí a mi Creador que si yo llegaba a aprender a leer y si lograba la libertad, que nunca leería esa parte de la Biblia.” La historia que comparte Thurman ilustra la manera en la que la Biblia fue utilizada en los Estados Unidos para fortalecer la institución de la esclavitud y la subyugacion de la gente Negra. Esto también nos recuerda que la manera en la que un texto bíblico se ha leído, entendido y usado lo puede llegar a tornar en algo desagradable, doloroso y peligroso para personas de ciertas identidades.

I’d like to start with a story. It is not my own. It comes from Howard Thurman, an African American activist, philosopher, activist, civil rights leader, and theologian who lived from 1899-1991. When he was young, he would read to his grandmother two or three days a week. She would often choose Bible passages, but he noticed that she never wanted to hear readings from the letters of Paul. One day he worked up the courage to ask her why. Her response? She grew up as an enslaved person on a plantation in Florida, and the plantation owner’s minister would sometimes hold services for the enslaved people. That minister always used Paul in his sermons, and three or four times a year, he would use the passage, “Slaves, be obedient to those that are your masters… as though to Christ.” Thurman’s grandmother said, “I promised my Maker that if I ever learned to read and if freedom ever came, I would not read that part of the Bible.” (Howard Thurman, Jesus and the Disinherited [Boston: Beacon Press, 1976, 1996].) Thurman’s story illustrates one way the Bible was used in the United States to reinforce the institution of slavery and the subjugation of Black people. It also reminds us that the way a Biblical text has been read, understood, and used can make it distasteful, painful, or harmful for people with particular identities.

No solamente es aquel mandato de “esclavos, obedezcan a sus amos" el que lleva consigo un legado de dolor y opresión. Pablo escribió una carta breve dirigida a Filemón, un creyente en Cristo; en ella Pablo le describe como Onésimo, quién se encontraba en la casa del mismo Filemón como esclavo, había ido a Pablo y se había convertido en cristiano. No conocemos los antecedentes de esta historia en su totalidad. ¿Quizá Filemón maltrató a Onésimo y Onésimo se escapó? ¿Quizás Onésimo huyó al temer una reprimenda por algo que haya pasado? O quizás Onésimo simplemente buscó librarse de su esclavitud. De todos modos, él logró llegar a Pablo y Pablo intercedió por él. Pablo manda de regreso a Onésimo con una carta y le dice a Filemón, “Tal vez Onésimo por esto se apartó de ti por algún tiempo, para que ahora lo recibas para siempre, ya no como un esclavo, sino como algo mejor que un esclavo - como un hermano querido. Yo lo quiero mucho, pero tú debes quererlo todavía más, no solo humanamente sino también como hermano en el Señor” (Filem 15-16). Suena bien, ¿cierto? Así lo vieron abolicionistas y usaron esta carta como evidencia de que los escritos de Pablo le enseñan a los cristianos a ponerle fin a la esclavitud. Pero otros lectores se enfocaron en el hecho de que Pablo mandó de regreso a Onésimo y el pasaje fue usado para argumentar que Pablo, como autor bíblico, hubiese apoyado la Ley de los esclavos fugitivos de 1850, la cuál requería legalmente que las personas esclavizadas que intentaran huir fueran devueltas a sus esclavistas. Los lectores veían en Pablo una figura de gran autoridad, pero gente de polos opuestos en cuanto a este mismo problema encontraban en sus escritos la lógica detrás de sus ideas sobre el buen-actuar.

It isn’t just the command “slaves, obey your masters” that carries a legacy of pain and oppression. Paul wrote a very short letter to Philemon, a fellow Christ-believer; in it he describes how Onesimus, who was enslaved in Philemon’s household, has come to Paul and has become a Christian. We don’t know the full background story. Perhaps Philemon mistreated Onesimus, and Onesimus ran away? Perhaps Onesimus fled because he feared punishment for something that happened? Maybe Onesimus just sought freedom from slavery. In any event, he made his way to Paul, and Paul intercedes on his behalf. Paul sends Onesimus back with a letter and tells Philemon, “Perhaps this is the reason he was separated from you for a while, so that you might have him back forever, no longer as a slave but more than a slave, a beloved brother—especially to me but how much more to you, both in the flesh and in the Lord.” (Philem 15-16) Sounds good, right? Some abolitionists thought so, and used this letter as proof that Paul’s writings teach Christians to put an end to slavery. But other readers instead focused on the fact that Paul sent Onesimus back, and the passage was used to argue that the biblical author Paul would support the Fugitive Slave Act of 1850, which legally required people to send runaway enslaved people back to their masters. Readers looked to Paul as an important authority, but people on very different sides of the same issue all found in his writings what supported their ideas about what was right.

¿Es acaso Pablo racista? ¿Es la Biblia racista? Les podría compartir cómo la esclavitud del mundo greco-romano no se basó en la raza o la identidad étnica y cómo Pablo pensaba que Jesús iba a regresar pronto y por lo tanto no consideró usar ese tiempo para abolir la esclavitud…

Is Paul racist? Is the Bible racist? I could talk about how slavery in the Greco-Roman world wasn’t based on race or ethnic identity, and how Paul thought Jesus was coming back any day, so he didn’t think it was the right time to start working on abolishing slavery…

Permitanme mejor plantear las siguientes preguntas alternativas: ¿Cómo es que lectores e interpretes bíblicos usan textos como las cartas de Pablo para formar el mundo en el que vivimos? ¿Cómo es que el mundo en el que vivimos forma la manera en que experimentamos la conexión, la condena, la esperanza y el dolor en las escrituras bíblicas cómo las cartas de Pablo?

Instead, let me propose some alternative questions: How do readers and interpreters of the Bible use texts like Paul’s letters to shape the world we live in? How does the world we live in shape the way each of us finds connection, condemnation, hope, pain in biblical writings like the letters of Paul?

Preguntas de discusión

Questions for discussion